Base:
Trituramos las 15 galletas. Derretimos la mantequilla y le añadimos 2 cucharadas de ron 1 cucharada de esencia de vainilla, 2 cucharadas de crema de avellanas y crema de almendras. Lo disolvemos bien y le añadimos las galletas trituradas. Extendemos la pasta por toda la base del molde y la horneamos a 200º durante unos 4 o 5 minutos. La sacamos del horno y la dejamos enfriar.

Relleno:
Ponemos a calentar los 400 ml de nata sin lactosa junto con los 100 ml de leche de nueces de macadamia. Le añadimos 2 cucharadas de azúcar, una cucharada de crema de almendras y otra cucharada de crema de avellanas, hasta disolverlo. Cortamos a trozos una tableta y media de turrón de jijona, y lo desmenuzamos hasta casi tener una harina. Poco a poco incorporamos el turrón a la crema que acabamos de explicar y lo mezclamos todo bien.
Esperamos que se enfríe e incorporamos uno a uno los 6 huevos. Y lo batimos lentamente. Incorporamos al molde, con la base, la crema de turrón despacito. Horneamos a 200º unos 30 40 minutos nuestro pastel. Cuando le queden 15 minutos añadimos los frutos secos por encima que servirán para decorar nuestra tarta. Y para unirlo todo muy bien le damos un toque de miel por encima y lo introducimos en el horno, los 15 minutos que nos queda. ¡Cuando se enfríe la añadimos al congelador durante 12 horas y lista para comer!